lunes, 17 de diciembre de 2007

Fin de (este) problema

Fin del problema. La persona que causó el accidente se ha presentado, tal como dijo, a mediodía de hoy en el taller de Ciclos Otero y ha pagado de su bolsillo la reparación. Y esta tarde, según me ha dicho el mecánico, tendré la bici como nueva.

No tengo la engorrosa necesidad de ir a juicio, por lo que ya no busco testigos. Pero gracias a todos los que se han ofrecido a ayudar de una u otra forma y a los que me han dado apoyo. Como ya he explicado, lo único que quería era volver a mi estado anterior y habitual: con bici y sin dolor de espalda. A por la bici iré en minutos... y la espalda me dolía –según me han dicho– por una pequeña contractura que ya está remitiendo.

Como lo cortés no quita lo valiente, tengo que reconocer que, esta vez, la persona que me atropelló ha tenido un comportamiento impecable. Hasta nos hemos felicitado las fiestas.

Ella me ha querido dejar claro, en todo momento, que era su aseguradora la que le estaba poniendo pegas a ella para aceptarle el parte amistoso de accidente, que ella sí quería tramitar. Es una chica más o menos de mi edad, así que, probablemente por pegas quería decir que, al ser joven, la aseguradora le subiría la prima de forma exorbitada si ella daba ése parte. A mí, su aseguradora tampoco me daba mucha confianza (ni la suya, ni ninguna), en el sentido que me han hablado de escenarios en los cuales el señor perito aparece a los tres meses por el taller, dice que tu bici está siniestrada y te deja con 40 euros, 3 meses sin haber usado tu bici y cara de tonto.

Si la prima del seguro sube tanto por un parte de 140 euros (de mier…) y las aseguradoras –por contra– luego no son nada generosas a la hora de indemnizar a los ciclistas. ¿Adónde va el dinero que vuela entre medias?, me pregunto.

Una de las cuestiones que me planteé a la hora de decidir no comprarme un coche y utilizar bicicleta + transporte público pese a tener carné de conducir desde 2003 fue ésta: ¿Quiero estar obligado a pagar anualmente una suma desmesurada de dinero a unos señores para que se responsabilicen de mis cagadas en algunos supuestos?

Claro que, cuando mi Opel Kadet de 18 años pasó a mejor vida, me hice muchas más preguntas, e incluso más trascendentales: ¿Necesito realmente un coche para moverme por Madrid? ¿Y fuera de la provincia? ¿Puedo hacer algo para intentar dañar un poco menos el medio ambiente? ¿Puedo poner un granito de arena para evitar que todos tengamos que tragar humo y escuchar bocinas y motores constantemente? ¿Puedo mejorar aunque sea una pizca infinitesimal la belleza de mi entorno? ¿Quiero gastarme un pastón en un coche o prefiero gastarme el mismo dinero en estudiar? ¿ué me va a aportar más? ¿Necesito un coche para reafirmar mi virilidad?

Estas preguntas responden a una mezcla de intereses individuales y colectivos y para todas ellas había una respuesta: coche no.

En el único aspecto que echado de menos el coche es en lo práctico que es para realizar escapadas afuera de Madrid y esto probablemente se pueda achacar a la pésima oferta ferroviaria de nuestro país. Las escapadas, de todas formas, las sigo haciendo: o bien en autobús o bien en el coche de algún amigo... o incluso alquilando una furgoneta.

Lo dicho. Doy por cerrado este problema. Pero esta tarde vuelvo a las calles de Madrid con mi bici y seguro que no tarda en pasar algo que merezca ser reseñado en este blog. ¡Un saludo a todos!

7 comentarios:

Juan Luis dijo...

Hola,

Me alegro muchísimo que todo se haya arreglado. Es una vergüenza el tema de las aseguradoras. ¿Para qué pagamos el seguro de daños a terceros? ¿Sólo para cuando se producen daños a otro coche? Es indignante. Y eso que sólo se trata de 140 cochinos euros.

Totalmente de acuerdo con tu reflexión coche - bicicleta. Los ciclistas parece que somos vistos como una especie de idealistas o soñadores, cuando realmente, cuando optamos por la bici en lugar del coche lo hacemos basándonos en unas razones más prácticas: ahorro de tiempo y dinero, salud, ecología o simplemente porque nos divierte mucho más que ir encerrados en un coche.

Muy útil tu blog, podríamos utilizarlo como referencia para saber qué hacer cuando suframos algún incidente parecido.

Un saludo,

Indio dijo...

Simlpemente Enhorabuena!
Seguramente a la conductora le salia mas barato pagar los 140 euros que lo que le subirian el seguro...pero en fin, ya tienes de nuevo lo que es tuyo.
Cuando pase por Gran Via y vea a alguien en Bicicleta seguro que me acuerdo de ti.
Felices Fiestas.

el Ciclista Atropellado dijo...

Gracias a los dos, Juan Luis e Indio. A nivel de referencia para un accidente parecido... no me ha quedado nada claro -por desgracia- el papel de la justicia y el de las aseguradoras. Pero sí que los lazos de solidaridad entre personas funcionan... y mejor de lo que nos quieren hacer creer. Yo creo que ante estos casos, si hay que denunciar, por supuesto que se denuncia. Pero además hay que unirse con quienes comnparten tus intereses o reivindicaciones: hoy por mí, mañana por tí. Un abrazo.

Unknown dijo...

Mi consejo es siempre denunciar, diga lo que diga el policía. Mi caso:

Yo iba caminando por la acera, con coches aparcados sobre ella. En esto que sale un tipo de un bar y me dice que le acabo de rayar el coche con una llave. Me enseña el rayazo (que era de aupa), y sale un colega suyo del bar diciendo que me había visto. Total, que yo digo que no había sido, y llaman a la policía. Cuando llegan los policías municipales, el tipo del coche valora los daños en 300 euros, y el policía me dice "mejor que los saques en un cajero y te evitas el juicio, ya que son dos contra uno y siempre pierdes".

Total, que me negué, y los tipos me denunciaron. Me tomaron los datos, fui a declarar y consulté con un abogado: por lo visto, "ser dos contra uno" no funcionaba en este caso, porque los dos tipos tenían relación entre sí, y se quedó en un caso de uno contra uno. No tuve que pagar.

Con esto quiero decir que los policías quieren evitar las denuncias (para ahorrar trabajo, tal vez?), e incluso te dan un "asesoramiento" legal al vuelo para el que no están preparados en absoluto.

A tí te recomendaron no denunciar, cuando al final tienes derecho al arreglo de la bici y a cualquier indemnización por daños físicos que pudieras haber sufrido. Conozco gente que cobró más de 5000 euros de indemnización cuando sólo "le dolía el cuello un poquito", pero resulto ser una hernia cervical.

el Ciclista Atropellado dijo...

Pues tienes razón en todo, X. Lo del 'asesoramiento legal' de la policía es de aúpa... pero yo caí en la inocentada y les hice caso en todo. Con lo cual me compliqué el camino si quería ir a juicio: no tenía testigos presenciales (por eso este blog) y no había denunciado ni ido a un centro médico el día que sucedió el accidente.

El asunto pintaba bastante complicado y además me pillaba en un momento que tenía otros problemas... y me planteé que lo único que quería era tener mi bici y poder olvidarme del accidente. Y bueno... me han pagado la bici y asunto "olvidado"... Pero para una próxima vez, que espero que no suceda, ya sé lo que hay que hacer desde el principio. Pedir teléfonos a testigos, ir al médico, denunciar... y luego, si y sólo si hay disposición a compensarte de forma inmediata y no hay daños físicos, retirar la denuncia.

Anónimo García dijo...

Enhorabuena por haberlo conseguido! Acabo de dar con tu caso y ha sido una buena lección.
Feliz pedaleo!

Eynar Oxartum dijo...

Qué bien, me he leído las entradas que hablaban del accidente y me he alegrado mucho de leer un final feliz.

Y qué pena que haya por ahí gente suelta como los que escribieron los dos primeros comentarios de la primera entrada (o sea, que si voy por el carril bus, todo el mundo tiene licencia para pasarme por encima, ¿no?).